Y llamarán a tu puerta
¡¡¡Elecciones a la vista!!! Y como cada vez que se avistan elecciones comienza la movilización partidista para buscar candidatos que engorden las listas electorales.
Miguel Rodero
Como siempre hay voces cantantes, gente en la sombra y personal de relleno, que sin pretender faltarles el respeto, normalmente quienes cumplen esta última función por quien no son respetados es por los grupos políticos que les utilizan para significarse con una causa y una vez pasado el trámite electoral se olvidan de ellos hasta cuatro años después.
También llegan los pactos secretos, los que se realizan de una forma pre-electoral y que son la vergüenza de la democracia, políticos que sin haber obtenido todavía el apoyo de los votantes, se atreven a especular con sus posibilidades, normalmente para objetivos que distan mucho de buscar un beneficio para el pueblo y se aproximan más al beneficio del partido al que representan.
Y también llegan las reuniones de partido, en las que una minoría de los que expondrán su nombre en una lista política, realizaran un programa electoral para que lo secunden todos, incluido el personal de relleno. Por cierto programas exaltados, que tendré la ocasión de desmenuzar en este blog, y que tristemente suele tener más puntos inalcanzables que objetivos reales. En política todo vale por un puñado de votos.
Si, no me olvido de los radicales que realizaran campaña subversiva de sus líderes, principalmente gente con dos dedos de frente que pinta coches, paredes, amenaza… todo con el fin de que quien opine distinto a lo que le han dicho que él tiene que opinar, sea silenciado, una tarea fácil en un pueblo de mil habitantes.
En definitiva, yo tan solo quiero pedir que quienes asuman la responsabilidad de ir en una lista política en las próximas elecciones que: tengan proyectos que aportar a la vida del municipio, entren con la convicción de decidir con el objetivo del bien común y no del interés de las minorías particulares, sean unas personas que defiendan los valores democráticos y constitucionales, y finalmente sepan adquirir una postura asertiva que defienda nuestros legítimos derechos sin la intención de herir o perjudicar a nadie por tener un opinión contraria a la suya.
Y para quienes piensen que esta opinión dice obviedades, le recomiendo que asista un día a un pleno del Ayuntamiento, y después comente su parecer.
4 comentarios
Anónimo -
Anónimo -
anonimo -
pero creo que estaría interesante poder leerlos ahora y contrastar con la realidad....
Anónimo -