El Ayuntamiento de Candelario nuevamente hace la “vista gorda” para no sancionar a la Sociedad de Cazadores de Candelario por pegar carteles en lugares no permitidos.
Me refiero concretamente, aunque no únicamente, al cartel que se pego en el tablón de anuncios del centro medico, lugar no habilitado para pegar carteles que no sean exclusivamente del consistorio.
Esta controvertida norma, que en su día fue criticada por este medio, fue creada por el Ayuntamiento de Candelario con el único fin limitar la libertad de expresión a los tablones establecidos para ello. Medida que tomó ante las diferentes manifestaciones de grupos y ciudadanos motivados por diferentes causas.
Pero esta norma parece que solo afecta a quienes pegan carteles que no están de acuerdo con la mentalidad del Alcalde o sus acólitos, mientras que todo el resto de personas que sean “amigos” pueden saltarse las normas municipales sin cargo alguno.
Esta crítica no es en ningún modo contra la Sociedad de Cazadores, es tan solo un nuevo recordatorio de que las normas son para todos o para ninguno, y quien tiene la obligación de hacer cumplir sus normas es el Ayutamiento, y si ya se han dado cuenta de la estupidez de la norma que la retiren en la próxima sesión plenaria.