Pasada ya la resaca de estos días, y lo digo no como expresión, y encarando el nuevo año que se nos avecina, es conveniente volver la mirada a los meses que ya se han consumido y poder analizar las situaciones pasadas.
Lamentablemente desde mi punto de vista el año 2009 no ha sido un año para alegrarse precisamente en Candelario, aunque si es cierto que la tendencia es hacia una normalización en las relaciones humanas y una mayor dialogo.
En clave política, la situación no ha variado prácticamente en un año, gesto más que preocupante cuando da la casualidad que los proyectos paralizados son la base de nuestro pueblo; residencia de ancianos, ampliación los Llanos, aumento de los impuestos… Sin embargo algunas pinceladas como la implantación del ADSL dan una gota de aire para respirar.
El equipo de gobierno comienza el año como lo acabo, atascado con el proyecto del Parque de Nieve y criticado por la nefasta regulación del Tráfico Rodado en la Villa.
El primer problema, el Parque de Nieve, lejos de convertirse en una solución es necesario que los ciudadanos sepamos que la enorme inversión económica que supone hundiría económicamente al pueblo durante años. Fuera del contexto económico y realizando una mesa de diálogo y modificando el contexto agresivo en el que lo ha envuelto Germán Martín, la idea no es mala si entendemos el Parque de Nieve como una atracción para el turismo familiar, no agresivo y proporcionado, olvidándonos de utilizarlo como punta de lanza para realizar posteriormente pistas de esquí y pamplinas similares.
En cuanto a la regulación del Tráfico Rodado, es lamentable contemplar cómo alguien es capaz de poner el pueblo patas arriba sin tener ni puñetera idea de lo que está haciendo, siendo irracional y discriminatorio, beneficiando a sus amigos y compañeros y perjudicando a quienes no son de su gusto. En definitiva es el claro ejemplo de lo que sucede cuando un sinvergüenza gestiona un proyecto de esas magnitudes.
Ahora pueden salir mis críticos reprochándome los términos que uso, pero mientras que yo si pongo nombre a mis palabras, otros se escudan detrás de un cargo público para hacer de su capa un sayo.
A nivel humano, Candelario comienza una nueva unión tras la ruptura que sufrió la villa durante las elecciones y en los meses posteriores. Las partes se van acercando y las rencillas limando, teniendo ya un clima de normalidad entre la mayor parte de los habitantes. Punto que es de vital importancia para un pueblo pequeño como el nuestro.
Y qué decir más… Desde Candelario Opina y tras nuestra alianza con Béjar Noticias nos situamos como uno de los principales medios informativos de la Comarca, y con el lanzamiento de nuestra edición impresa y su gran aceptación por los ciudadanos nos acomodamos como una plataforma informativa fiel, veraz y libre.
Y yo, a título personal quiero agradecer públicamente a cuantos nos apoyan y confían en nuestra visión de lo sucedido, porque evidentemente todo se puede ver desde muchos ángulos, y nos siempre el nuestro es el mejor, y llegan días que nos equivocamos, pero lo que si garantizamos es que no nos movemos por intereses económicos ni partidistas, no nos dejamos comprar ni aceptamos presiones.
Espero que este año 2010 nos traiga mayor dialogo y transparencia, ingredientes necesarios para poder aprovechar los 12 meses que tenemos por delante, antes de volvernos a sentar para reflexionar sobre otro año pasado.
Para despedirme solo quiero agradecer nuevamente a los lectores su apoyo y desearos un Feliz Año Nuevo.
Miguel Rodero. Director de Candelario Opina
